El pasado 20 de septiembre se llevó a cabo la proyección de la película “Isla de ensueño” (1962) del director Alejandro Kerk en un nuevo ciclo de la agenda académica de Memoria Activa. El conversatorio previo a la función estuvo dirigido por Rito Alberto Torres, subdirector técnico de la Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano y el realizador audiovisual Gabriel González, docente de la Universidad Nacional y director de la película “Estrellas del sur” (2013).
Cabe mencionar que el programa Memoria Activa es realizado en alianza con el Canal Universitario Zoom y la Universidad Uniagustiniana. Su objetivo fundamental es la socialización de la memoria audiovisual colombiana por medio de materiales que han sido preservados, restaurados y digitalizados por la fundación, y que, en el caso particular de “Isla de ensueño”, son propiedad de la entidad.
A lo largo del conversatorio se discutió sobre la propuesta de Kerk, a propósito de esta película, y se llegó a la conclusión de que la búsqueda de un discurso popular en el cine resulta de gran importancia para entender por qué las producciones colombianas a veces no conectan con su público. Así este filme ayuda a los realizadores de cine a comprender los códigos que se exploraron durante los años sesenta y que no fueron apropiadamente promocionados, por lo que contaron con un público disperso en el que este tipo de obras audiovisuales no impactaron.
Así mismo, Rito Alberto Torres hizo una aclaración con respecto a la película, ya que equívocamente se le conoce como “San Andrés, isla de ensueño”, cuando realmente su nombre original es “Isla de ensueño.” Torres comenta− a modo de anécdota− que el titulo fue ingresado en el catálogo con ese nombre y por eso, se tiende a la confusión. También indicó que los negativos de esta película fueron llevados a Alemania por su director, por lo que no se cuenta con el material. Hay que mencionar que “Isla de ensueño” es el segundo largometraje de color del cine colombiano y su importancia también se debe a la forma en la que detalla a San Andrés, en medio de una idea exotizante en la que se hace clara la diferencia entre lo continental y lo insular.
Esta cinta tuvo en su reparto a Régulo Ramírez, Sandra Scott, Henry Caucho y el fallecido Hernando González, recordado por su participación en películas como “Antioquia crisol de libertad” (1960), “El río de las tumbas” (1965) y la “Ópera del mondongo” (1975).