El increíble torbellino de ‘Alma provinciana’: Un retrato de la realidad
“Para complacer a la señorita los campesinos le bailan el famoso torbellino”.
Con este maravilloso clip de una de las danzas folclóricas más representativas del departamento de Santander y Cundinamarca, Felix Joaquín Rodríguez le da un nuevo giro al cine silente de la década de los años veinte, planteando así una mirada a la esencia nacional de la época. A sus escasos 28 años, el director de cine y pintor presenta ‘Alma provinciana’.
Estrenada al público el 13 de febrero de 1926 en el famoso Teatro Faenza, este filme cómico de carácter costumbrista relata la historia de amor de los hijos de un adinerado hacendado quienes parecen elegir mal, ante los ojos de su padre, sus parejas amorosas.
Por un lado, María, una típica joven de la capital se enamora de Juan Antonio, el mayordomo que trabaja en la finca de su padre y quién le declara su amor incondicional. De igual forma su hermano Gerardo, un bohemio intelectual al parecer un tanto mujeriego, se enamora de Rosa, una joven obrera de sentimientos inocentes y bondadosos. Con un tono reflexivo, natural y simple, Rodríguez se acerca de manera casi exacta al panorama actual de ese entonces.
Al momento de filmar ‘Alma provinciana’, Felix Rodríguez consciente o inconscientemente, quiso que su película fuera un largometraje en donde el movimiento y la exploración tanto creativa como humana estuvieran fuera del estudio. Decide entonces que más allá de grabar en el reconocido espacio de los hermanos Di Doménico y conseguir el equipo tradicional de ese entonces, se saldría de todos los parámetros de producción.
Aunque los primeros largometrajes nacionales eran bitácoras visuales que presentaban un contraste socioeconómico y ambiental del país, Rodríguez reabrió un nuevo capítulo a las páginas ya escritas; su apuesta sería, como se dijo anteriormente, a una exploración creativa del contexto.
Esta indagación artística lo llevó a realizar un rodaje fuera de los estudios, para así redescubrir los paisajes de La Sabana y Santander quienes serían los encargados de convertir a ‘Alma provinciana’ en el mayor clásico de cine silente de mediados de la década de los veinte.
Y es que su obsesión y pasión por plasmar la realidad de comienzos de siglo, se vio reflejada de inicio a fin en ‘Alma provinciana’: Bailes típicos, recorridos por el Páramo Almorzadero, corridas de toros entre otros reflejos de las tradiciones y costumbres. Había un delicioso y constante diálogo entre el campo y la ciudad, con sus antihéroes y eventos personales. Lo rural y lo capitalino eran los personajes principales de esta comedia romántica.
La producción de este fiel retrato costumbrista también fue un tema. A principios de siglo XX, las películas silentes eran las protagonistas de la industria fílmica. La creación y el equipo técnico de estas estaba conformado por aspectos básicos pero esenciales tales como el guion, la cámara, la dirección fotográfica, la escenografía, la música y los textos. Extraordinariamente, Rodríguez realizó todas las labores.
Esta búsqueda de autonomía y exploración humana, esta pasión por el cine sin decoraciones, también lo llevó a crear un reparto actoral natural. Sorprendentemente, los personajes en ‘Alma provinciana’ fueron amigos del director. Esto creó aún más una historia con gran contenido realista.
Con todo, ‘Alma provinciana’ es un torbellino cómico y romántico de reflexiones sobre la sociedad de principios de siglo. Con maravillosos paisajes y un contraste entre lo rural y la ciudad a partir del amor, Felix Joaquín Rodríguez logra una joya del cine silente que afortunadamente fue atesorada y expuesta por su esposa.
Ficha técnica
Félix Joaquín Rodríguez
Guion
Félixmark film (Félix Joaquín Rodríguez)
Productor
Félix Joaquín Rodríguez
Cámara
Susana Carrié
Diseño afiche
Félix Joaquín Rodríguez
Montaje
Félix Joaquín Rodríguez
Basado en su obra, “Isabel en los labios”.
Texto / Argumento