En el marco del BIFF, Bogotá International Film Festival, el pasado dieciséis de octubre la Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano, de la mano con Proimágenes Colombia, organizó la primera exposición de cámaras llamada “Lo que nuestros ojos vieron”, en la que se exhibieron un repertorio de dispositivos de gran relieve en la historia del audiovisual en Colombia.
El cóctel tuvo lugar en el lobby del Hotel Embassy Suite aprovechando el día del patrimonio audiovisual. Este evento tenía como fin la reflexión sobre el alcance que procura la mirada y asimismo, las tecnologías que históricamente se han aliado con un proyecto narrativo a lo largo de la tradición del cine nacional.
Cabe decir que la presentación y socialización de las diferentes piezas museográficas que constituyeron la muestra da cuenta de un exitoso esfuerzo por acercar al público al contexto de la imagen en movimiento en Colombia. Por tanto, esta oportunidad resultó de gran importancia para que los cinéfilos y amantes del séptimo arte reflexionaran sobre el papel de los dispositivos técnicos y su devenir a lo largo de la tradición cinematográfica.
Cabe destacar que la identidad de la exposición se basó en el diálogo entre el observador y el objeto, pues se propició una puesta en escena a partir de la colección. Asimismo se creó un espacio en el que la difusión cultural y la comunicación visual que respecta a estos aparatos trazó un campo en el que el valor de la imagen y el apoyo de la autenticidad del objeto, en su calidad de testimonio del pasado, estableció una comunicación directa y original con diversas audiencias.